jueves, 24 de mayo de 2012

Nobody gives a shit

Y luego, a todos nos gusta que nos reconozcan que, en realidad, lo intentamos.
Y eso hace que cada día muera un poquito más por dentro, que  me consuma mientras veo impotente como se destroza de nuevo mi castillo de arena. Esta vez me había quedado realmente bonito.

Pero me rindo. Me abandono al flujo de la especie gregaria que pone buena cara, y a no soñar más. Los finales son realmente devastadores, pero tienen que llegar... Y siento que cada vez queda menos para terminar esta historia y cerrar el libro. Y mientras una parte de mi se desgarra e intenta encontrar "el resto de la saga, porque esto no puede acabar así", la otra acepta que hay más cuentos que vivir.

***

 "-Qué falta de confanza. Hace que me sienta... vilipendiado. -¿Por qué no dices "infravalorado"? -Porque conozco la palabra "vilipendiado", y tú también, y es divertido decirla."

No hay comentarios:

Publicar un comentario