Es un laberinto de esperanzas y propósitos, de ilusiones, convicciones y canciones.
Es un jardín cerrado con llave, lo que no impide que llegue volando un colibrí, ni que tres niños salten la valla.
Es un castillo en el siempre se sonríe y se cuentan cosas bonitas, cuentos y cuentos, siempre. Sobre animales que cantan juntos para despertar a una princesa sin necesidad del beso de un príncipe. Cuentos de un monstruo sin nombre y de una espina sin rosa. Un cuento de una manta verde mágica. Miles de cuentos, cada día.
Es una casa oscura, sin cuentos, donde llueven lágrimas de ácido que deshacen el mundo.
Es amor. Incorpóreo, infinito y efímero amor.
***
And it's funny how I imagined that I would be that person now, but it does not seem to have happened, maybe I've just forgotten how to see that I'm not exactly the person that I thought I'd be.
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sábado, 9 de junio de 2012
viernes, 25 de mayo de 2012
Ser la diferencia
Cuando una persona se deja llevar por la inercia y se niega a pensar más. Cuando se acaba el pensar de nuevo y no te puedes encontrar a ti mismo. Cuando, a diferencia de los cuentos, no se encuentra ninguna satisfacción al conseguir algo diferente.
Recuerdo perfectamente la primera vez que leí un libro largo y sin dibujos, recuerdo cuando escribí mi primer cuento. Recuerdo cuando vi el dibujo que me hizo querer dibujar, y la obra de teatro que me hizo querer actuar. Recuerdo la primera vez que cogí la viola entre mis brazos. Recuerdo la emoción de crear. Y la frustración de intentar, e intentar, y nunca estar satisfecha. Y la decepción del día que me dije a mi misma por primera vez que, en realidad, no merecía la pena.
Y recuerdo, y siento el miedo al rechazo, pero sobre todo, a la mediocridad.
...
But you are my love, the astronaut.
Amanda Palmer y Neil Gaiman - Who killed Amanda Palmer? (Introduction)
Recuerdo perfectamente la primera vez que leí un libro largo y sin dibujos, recuerdo cuando escribí mi primer cuento. Recuerdo cuando vi el dibujo que me hizo querer dibujar, y la obra de teatro que me hizo querer actuar. Recuerdo la primera vez que cogí la viola entre mis brazos. Recuerdo la emoción de crear. Y la frustración de intentar, e intentar, y nunca estar satisfecha. Y la decepción del día que me dije a mi misma por primera vez que, en realidad, no merecía la pena.
Y recuerdo, y siento el miedo al rechazo, pero sobre todo, a la mediocridad.
...
But you are my love, the astronaut.
Amanda Palmer y Neil Gaiman - Who killed Amanda Palmer? (Introduction)
domingo, 8 de abril de 2012
Nostalgia edulcorada
Letras y notas que retumban como un terremoto en el microcosmos donde habitan las sonrisas, se acercaron lentamente y nos envolvieron con la suavidad que solo tienen la música y los besos.
Me gusta cuando las palabras tienen un sentido efímero que nunca volverá, porque solo así se redescubren los secretos. Zambullidas en un río de sutilezas que fluyen perfectamente incomprensibles, y que encierran siempre, al final, un te quiero.
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